La llegada de Lexus al Perú hace 12 años no fue simplemente una entrada al mercado automotriz; fue una invitación a experimentar el lujo desde una perspectiva que solo la filosofía japonesa puede ofrecer. Con un enfoque único, la marca de lujo de Toyota del Perú evoca excelencia, fusionando tradición e innovación en cada vehículo que comercializa.
“Cada vez que un cliente visita un concesionario, desde el momento en que cruza la puerta, se ve envuelto en una atmósfera que evoca exclusividad e innovación. La atención al detalle es palpable, y la hospitalidad japonesa, un concepto conocido como “Omotenashi”, se manifiesta en cada interacción”, explica Aldo Kobayashi, Gerente de Marca de Lexus Perú.
Los modelos de Lexus no solo destacan por su diseño elegante y sofisticado, sino que también representan un compromiso con la sostenibilidad. La línea de vehículos electrificados de la marca es un testimonio de cómo el lujo puede ser responsable, desafiando las normas y redefiniendo lo que significa conducir un auto de lujo en el siglo XXI. Es así que el 90% de su portafolio de vehículos ya son electrificados, incluyendo vehículos 100% eléctricos y vehículos híbridos eléctricos.
Sin embargo, lo que realmente distingue a Lexus es la meticulosidad con la que cada vehículo es fabricado. Los maestros “Takumi”, con décadas de experiencia, aportan su destreza y pasión en cada detalle, asegurando que cada Lexus sea una obra maestra. Es una dedicación que va más allá de lo técnico; es una filosofía de vida que se refleja en cada curva, en cada costura.
Lexus apunta a ofrecer una experiencia de conducción inigualable. Inspirados en la conexión entre jinete y caballo, la filosofía “Tazuna” busca que el conductor tenga una vinculación natural con su vehículo. Así, el conductor puede concentrarse plenamente en la carretera. Para ello, cada elemento del vehículo, como la posición del volante, ha sido diseñado para crear una experiencia de conducción intuitiva.
Con una larga trayectoria en el mercado peruano, Lexus ha logrado lo que muchos consideraban imposible: fusionar la tecnología de vanguardia con una filosofía de atención al detalle y respeto por el cliente. “No vendemos solo autos”, reflexiona Kobayashi. “Vendemos una experiencia que comienza en el momento en que el cliente entra en contacto con nosotros y continúa mucho después de que se llevan el vehículo a casa, gracias a nuestro servicio de postventa”.
En un mundo que cambia rápidamente, Lexus ha demostrado que la verdadera innovación no está reñida con la tradición. De hecho, es precisamente esta fusión de lo antiguo y lo nuevo, de la artesanía y la alta tecnología, lo que está escribiendo el futuro del lujo automotriz en el Perú.
