Cristina Gutiérrez apunta al top 25 en el Dakar peruano
Cristina Gutiérrez ya está preparada para afrontar su tercera participación en el Rally Dakar, que se celebrará en Perú del 6 al 17 de enero. Y lo hace con un plus de ilusión y motivación, puesto que este año dispone de un competitivo Mitsubishi Eclipse Cross de la categoría T1.2, un prototipo con el que la burgalesa aspira a luchar por el top 25 de la general en la prueba más dura del motor. La piloto oficial de Mitsubishi España corre dentro de la estructura de Sodicars Racing y cuenta con Pablo Huete como copiloto.
El cambio de vehículo ha supuesto un impulso decidido a las aspiraciones de la joven odontóloga de 27 años en la prueba reina de los grandes rally-raid. En sus dos primeras participaciones al volante de un todoterreno derivado de serie, el Mitsubishi Montero, Cristina se convirtió en la primera piloto española capaz de acabar la carrera en coche. Ahora, con el nuevo Mitsubishi Eclipse Cross prototipo, sus miras ya están puestas en atacar una buena posición en la general. “Llevamos todo el año trabajando en este proyecto, y tengo más ilusión y motivación que nunca. El objetivo no es otro que estar entre los 25 primeros“, afirma.
Esta nueva meta ilustra la clara progresión en el Dakar de la piloto del Grupo Antolin, que también cuenta con el apoyo de Mitsubishi España, Santander Consumer Finance, Uremovil, BF Goodrich, Junta de Castilla y León, Asti Mobile Robotics, Diputación de Burgos, EventsEuropa, Karbium y Yakart Autocaravanas. Después de la 44ª posición en su debut de 2017 en la carrera sudamericana, obtuvo un peleado 38º puesto en la pasada edición y una meritoria 2ª posición de T1.S, tras una prueba plagada de complicaciones que supo superar con ahínco y tesón.
Con más experiencia y un vehículo de chasis tubular, caja de cambios secuencial y 340 CV de potencia, Cristina se siente fuerte para escalar posiciones en la general, aunque el recorrido de esta edición no sea favorable a los coches 4×4 como el suyo. “Será duro, con tanta arena. El año pasado, la zona de Tacna en Perú fue lo más complicado del Dakar, y este año todo es en Perú. El hecho de que sean menos días y menos kilómetros no lo va a hacer más sencillo, ni mucho menos“, explica.
El optimismo de Cristina se ve reforzado por la buena pretemporada que ha llevado a cabo. Tras disputar un rally de tierra con un Mitsubishi Lancer Evo X, estrenó el Eclipse Cross en la Baja Aragón y el pasado mes de octubre participó en el rally TT de Guadalajara, donde debutó como copiloto Pablo Huete. El joven toledano de 28 años ha estado en los dos últimos Dakar como mecánico de Cristina, y sus conocimientos técnicos son todo un activo para el equipo. Huete ha asumido el nuevo rol en sustitución de Gabi Moiset, obligado a renunciar al no recuperarse a tiempo de las lesiones cervicales que sufrió en un accidente de rally en junio. Pese a ello, Moiset seguirá siendo una pieza clave del equipo en Perú, ya que ejercerá de team manager del equipo.
La piloto burgalesa ha completado la pretemporada con unas sesiones de tests en Marruecos y ha estado unos días en Andorra preparándose físicamente junto a otros pilotos españoles del Dakar. Todo ello le permite afrontar con plenas garantías la exigencia del Dakar peruano. “Tenemos más presión, pero es una presión positiva. Yo soy la primera que se exige resultados. Intentaremos ir de menos a más para seguir aprendiendo y acabar optando a un buen puesto en la general“, valora Cristina, que no piensa en la pugna por la categoría femenina sino únicamente en mezclarse entre los pilotos con monturas comparables a la suya.
Cristina Gutiérrez y Pablo Huete viajarán el 1 de enero a Lima, donde el día 6 se celebrará la salida protocolaria del Dakar 2019. El lunes 7 se disputará la primera de las diez etapas competitivas, con una jornada de descanso en Arequipa el sábado día 12. La prueba finalizará en la capital peruana el jueves 17 de enero después de un periplo de 5.600 kilómetros, de los que 2.956 (el 53%) serán cronometrados.